domingo, 22 de noviembre de 2009

Sintomas del autismo

Cada niño con autismo es diferente uno de otro, sin embargo se han establecido algunos comportamientos muy similares, tales como: Lenguaje poco o nulo, o bien pierde el habla. Ecolalia, repite lo mismo o lo que oye (frases o palabras). Actua como si fuera sordo, pero no soporta ciertos sonidos o luces muy fuertes como por ejemplo, la licuadora o el microondas. No mira directamente a los ojos. Se obsesiona con los objetos sin razón alguna. No muestra ningun interés por los juguetes y/ o no los usa adecuadamente. Tiende a reunir objetos o los pone en línea. Muestra total desinterés por su entorno y en las relaciones sociales con los demás. No responde a su nombre. No obedece ni sigue instrucciones. Cuando quiere algo, no lo pide, toma la mano de alguien dirigiéndola a lo que desea. Rechaza el contacto físico. No le gusta que lo toquen o carguen. Aleteo de manos (como si intentara volar) en forma rítmica y constante. Gira o se mece sobre sí mismo. Se queda quieto observando un punto como si estuviera hipnotizado. Camina de puntitas (como ballet). Puede ser un niño hiperactivo (muy inquieto) o pasivo (demasiado quieto). Muestra agresividad y/o puede ser en ocasiones auto agresivo (se golpea a sí mismo). Tiene una gran obsesión por el orden y la rutina, rechaza los cambios. Se enoja mucho y hace rabietas sin razón aparente o porque no obtuvo algo. Sonrie sin razón aparente (como si viera fantasmas). En ocasiones, estos niños, además de ser autistas, tienen algún otro trastorno del desarrollo (retraso mental, motriz, Síndrome de Down, etc.) Solo un pequeño segmento de niños con autismo, llega a mostrar alto grado de inteligencia; su falta de aprendizaje se hace evidente, debido precisamente a su pobre o nula comunicación. Esta lista es solo una referencia, para un diagnóstico certero, es necesaria la asesoria de un neurólogo así como la valoración del psicólogo.



1 comentario:

Necesidades Educativas Especiales dijo...

- Acentuada falta de reconocimiento de la existencia o de los sentimientos de los demás.
- Ausencia de búsqueda de consuelo en momentos de aflicción.
- Ausencia de capacidad de imitación.
- Ausencia de juego social.
- Ausencia de vías de comunicación adecuadas.
- Marcada anormalidad en la comunicación no verbal.
- Ausencia de actividad imaginativa, como jugar a ser adulto.
- Marcada anomalía en la emisión del lenguaje con afectación.
- Anomalía en la forma y contenido del lenguaje.
- Movimientos corporales estereotipados.
- Preocupación persistente por parte de objetos.
- Intensa aflicción por cambios en aspectos insignificantes del entorno.
- Insistencia irrazonable en seguir rutinas con todos sus detalles.
- Limitación marcada de intereses, con concentración en un interés particular.